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Discípulos del Diablo
Córdoba,
27 septiembre 2021 Si definiéramos al cristianismo liberal moderno, usando para ello como ejemplo los partidos políticos de derechas (que son los que usan estos términos), veríamos como en todos sus casos (como el PP y Vox, en España) utilizan una especie de pacto con Dios, para ponerlo en su programa y atraer al votante creyente. Pero si nos fijamos bien en ese programa, veremos que dichos partidos hablan siempre de cristianos y nunca de católicos, ya que a todos ellos la Iglesia Católica les da igual. Se trata de un pacto consistente en un serie de malabarismos lingüísticos, con los que esos partidos (de derechas) maquillan las mismas políticas de la izquierda (sin que lo parezca) y las presentan como si ellos fuesen los más cercanos a la religión y a Dios. Un ejemplo lo tenemos en el aborto, en que insinúan estar en contra pero siempre ponen sobre el tapete los tiempos y las formas, porque el fondo les da igual. Igual pasa con la homosexualidad, en que piden no llamar matrimonio a la unión de estos sujetos pero sí que aceptan, y van a las bodas, que sus colegas homosexuales han realizado en el seno de su propio partido. Y lo celebran con júbilo y cámaras presentes, para recochineo hacia los creyentes en Dios. Señores de derechas-liberales-cristianos, son ustedes unos cobardes, unos travestis que adaptáis la religión de Dios a vuestros propósitos bastardos, engañando y promulgando que se puede creer en Dios y aceptar vuestro programa político, basado en el aborto disfrazado, la homosexualidad escondida, el divorcio tapado y unas cuantas vergüenzas de género más, que van totalmente contra la fe en Dios. Los partidos de izquierdas se declaran enemigos de Dios, y por eso apostatan de su bautismo católico y se unen a la cultura de la muerte de Satanás. Allá ellos, pues "quien no practicó la misericordia, no será digno de recibir misericordia de Dios" el día que se mueran. Pero vosotros los de derechas sois unos cobardicas, que queréis poner una vela a Dios y otra al diablo. "No se puede servir a dos señores", os dijo ya Jesucristo en su evangelio. Aprended, por lo menos, aquello que decís que queréis defender. En 40 años de restauración democrática en España, por seguir con el mismo ejemplo, siempre ha pasado lo mismo: unos tiran la piedra y los otros son tan tontos que no se quitan el chichón. .
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