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TEÓFILO DE ANTIOQUÍA

resumido por

ESCUELA DE JÓVENES CRISTIANOS, FILIAL DE MERCABÁ

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Teófilo de Antioquía (120-183) fue apologeta sirio y el primer escritor eclesial en abordar un tratado completo sobre la Trinidad y una cronología de hechos históricos de la Biblia.

Vida. Teófilo fue, según Jerónimo y Eusebio de Cesarea, el sexto obispo de Antioquía de Siria. Había recibido una buena formación literaria en el paganismo, y se convirtió ya en edad madura, según él mismo explica, por el estudio de las Escrituras sagradas.

De sus escritos se deduce que nació en una localidad cercana al río Eufrates, que perteneció a una familia pagana y que recibió educación helenística (entendiendo por helenística la mezcla de la cultura griega con otras culturas conquistadas por Alejandro Magno).

Teófilo es el único de los apologistas que estuvieron revestidos del carácter episcopal, en una sede tan importante como Antioquía.

Obras. Teófilo fue el primer autor cristiano que hizo un Comentario del Génesis, analizándolo exegéticamente con detalle y proponiendo una interpretación de tendencia historicista.

Escribió también un Comentario a los Evangelios, muy familiarizado con los escritos del NT y el evangelio de Juan, enseñando que estos libros proceden de autores inspirados y tienen un valor análogo al de las antiguas Escrituras.

De Teófilo se conserva un escrito apologético dirigido a su amigo Autólico, y dividido en tres libros: su Apología a Autólico (ca. 180). En él da muestras de su conocimiento tanto de los autores paganos como de las Escrituras, y hace una apología en defensa de los cristianos, cuya sangre seguía corriendo en sucesivas persecuciones.

Como era frecuente en la antigüedad, quizás Autólico no fuese un personaje real, sino que encarnara al prototipo de pagano del siglo II: un hombre culto, que reconocía en los cristianos a hombres cultos, y demasiado perdido en cuanto a la doctrina de Cristo. Teófilo intenta salir al paso de estas y otras razones, tratando de convencer a su lector de las fuertes razones para creer en los cristianos.

El libro I de su Apología trata de la esencia de Dios, a quien sólo pueden ver "los ojos del alma". Habla también del significado del nombre cristiano, de la fe en la resurrección, de la necedad y la idolatría, y de la diferencia entre el honor tributado al emperador y la adoración debida a Dios.

El libro II de su Apología, que completa al primero, establece una comparación entre la mitología griega y las enseñanzas de los profetas, inspirados por el Espíritu Santo, sobre la creación del mundo y del hombre.

En el libro III de su Apología refuta las acusaciones de los paganos contra los cristianos, en materia de moral y costumbres.

Escribió también Teófilo otras obras, que hoy no han perdurado, como Contra Hermógenes, Contra Marción y una Armonía de los Evangelios.

Jerónimo menciona haber leído diversos comentarios a los proverbios y los evangelios con el nombre de Teófilo, pero inconsistentes con la elegancia y el estilo de sus otros trabajos.

Doctrina. Teófilo es el primer escritor que utiliza la palabra trías para referirse a las tres personas divinas. Es también el primero que distingue entre la Palabra inmanente en Dios (Logos endiácetos) y la Palabra proferida por Dios (Logos proforikós). Por otro lado, piensa que la inmortalidad del alma no es algo natural, sino un premio a la obediencia a Dios, idea que posiblemente había recibido de Taciano.

Escritura. Teófilo afirma claramente la inspiración de los libros del NT, y llama a los evangelios lo mismo que a los profetas: "Santa Divina Palabra".

En esos escritos es donde se encuentra, según Teófilo, al Dios verdadero, y donde quedan al descubierto los idólatras (que fustigan los profetas), los fabulistas (que desmontan los cristianos) e inmorales (que reprueba el propio Jesucristo).

Repite también Teófilo, por último, la idea de que Moisés es más antiguo que cualquier filósofo griego.

Dios. Teófilo de Antioquía fue el primero en usar el vocablo griego tριας para expresar la unión en Dios de tres personas divinas: Dios (el Padre), su Palabra (Logos), y su Sabiduría. De ese vocablo derivó luego la forma latina trinitas, usada por 1ª vez por Tertuliano.

Jesucristo. Teófilo es el primer autor cristiano que distinguió entre el Logos endiácetos y el Logos proforikós. Es decir, entre el Logos interno o inmanente en Dios, que estaba en éste desde toda la eternidad (endiácetos), y el Logos emitido o proferido por Dios, emitido para realizar la obra de la creación del mundo (proforikós).

En ese sentido, todas las epifanías del AT serían propias del Logos, y no del Padre. Es decir, que fue Dios Hijo quien habló con Adán, con Moisés...

Hombre. Teófilo considera la inmortalidad del alma no como algo inmanente a su naturaleza, sino como recompensa a la observancia de los mandamientos de Dios. El alma humana, viene a decir Teófilo, no es de suyo ni mortal ni inmortal, pero sí es capaz de mortalidad o inmortalidad, dependiendo de su fidelidad a Dios.

Es decir, que Dios creó al alma humana susceptible de mortalidad o inmortalidad, independientemente de su decisión y como elemento que hizo al hombre libre y dueño de sus propios actos.

Ver aquí su Apología a Autólico (, y ).
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cf. IBÁÑEZ, J; "Teófilo", en Gran Enciclopedia Rialp, ed. Rialp, Madrid 1991.

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Molina de Segura, 13 de Mayo de 2024