Paso 10 de Santidad
MARÍA SANTÍSIMA, I
Escuela
Jóvenes Cristianos
Molina de Segura, 26 julio 2021
escritura
1.
Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo (Lc
1, 28).
2.
Ella (María) se conturbó por aquellas palabras y discurría qué significaría aquel saludo
(Lc 1, 29).
3.
El ángel le dijo: No temas, María, porque has hallado gracia delante de
Dios (Lc 1, 30).
4.
Dijo María: He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu
palabra (Lc 1, 38).
5.
Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre (Lc
1, 42).
6.
Su madre, María, conservaba cuidadosamente todas estas cosas en su corazón
(Lc 2, 51).
7.
Todos perseveraban en la oración, en compañía de María
(Hch 1, 14).
magisterio
8.
Seguid confiando en la protección y cuidados maternales de María (JUAN PABLO II,
26-5-1990).
9. Que María Santísima, la adoradora más perfecta de la Santísima Trinidad, ilumine, sostenga y acompañe nuestra
fe (JUAN PABLO II,
26-5-1991).
10.
María, dando al mundo el Verbo, da al hombre la posibilidad de alimentar en el espíritu la esperanza que no defrauda
(JUAN PABLO II,
5-2-1990).
11.
María ayuda a todos los hijos a encontrar en Cristo el camino hacia la casa del Padre
(JUAN PABLO II,
25-3-1987).
12.
Nada se nos distribuye a los hombres sino por medio de María, por quererlo Dios así; de modo que de la misma manera que nadie puede acercarse al Padre Supremo si no es por su Hijo, nadie puede acercarse a Jesucristo si no es por su
madre (LEÓN XIII,
OM).
13.
La presencia de María debe ocupar todas las vías de nuestra vida cotidiana
(JUAN PABLO II, RH).
14.
María, modelo inagotable de perfección: por mucho que nos esforcemos en imitarla tendrá siempre algo que enseñarnos
(JUAN PABLO II,
11-2-1988).
15.
La Virgen sostiene al pobre que confía en ella (JUAN PABLO II,
15-7-1990).
16.
María es comienzo de un mundo nuevo, de un mundo mejor en Cristo Jesús. Ella misma, inspiración para todas las generaciones del
pueblo de Dios en su peregrinación terrenal (JUAN PABLO II,
21-8-1989).
17.
Poned las esperanzas en el corazón de María (JUAN PABLO II,
1-1-1990).
18.
La vida de María fue un continuo sí al amor (JUAN PABLO II,
18-5-1988).
19.
Tratad de descubrir la belleza del Rosario. Que esta oración os vaya acompañando cada día de vuestra vida
(JUAN PABLO II,
27-3-1988).
20.
La maternidad de María es espiritual que se realiza, según la tradición cristiana y la doctrina de la Iglesia, en el orden de la
gracia. Madre de la Gracia la llama el Concilio Vaticano II. Por tanto, es esencialmente una maternidad sobrenatural que se inscribe en la esfera en la que opera la
gracia, generadora de la vida humana en el hombre (JUAN PABLO II,
23-11-1988).
21.
La Iglesia no cesa de pedir a la Madre de Dios que se mantenga cercana para recordar el misterio que
ella conservaba meditándolo en su corazón (JUAN PABLO II,
1-1-1990).
tradición
22.
Es imposible que se salve quien abandona a María (San
ANSELMO).
23.
Sólo el Espíritu Santo puede dar la gracia de conocer a su esposa, Madre de Dios
(San MAXIMILIANO
KOLBE).
24.
La devoción a la Santísima Virgen es el apoyo de todo cristiano, pero muy particularmente de los jóvenes
(San JUAN BOSCO).
25.
¡Qué de cosas he comprendido rezando despacio el Avemaría! (Beato GUIDO DE
FONTGALLAND).
26.
Quien pretende las gracias sin la intervención de María, intenta volar sin alas
(San ANTONINO).
27.
Tienes que tener gran devoción a la Virgen María, le has de rezar el Rosario
(Beata FRANCINAINA DE
SENCELLES).
28.
Así como el respirar es señal de que el cuerpo no está muerto, del mismo modo, el pensar con frecuencia en María e invocarla amorosamente es señal cierta de que el alma no está muerta
(San GERMÁN DE
CONSTANTINOPLA).
29.
Gran cosa es lo que agrada a nuestro Señor cualquier servicio que se haga a su
madre (Santa TERESA DE JESÚS).
30. ¡Qué gran bien es para uno ser hijo, aunque indigno, de esta gloriosa
madre! (San FRANCISCO DE
SALES).
31.
Confiaré siempre en la Virgen. Hoy la he invocado y se ha dignado ayudarme: no siento fatiga alguna
(Santo CURA DE ARS).
32.
Si practicamos gustosamente y con fervor las virtudes, ella vendrá en nuestra ayuda
(San JUAN DAMASCENO).
33.
La devoción al Rosario, después de la Misa, es la más provechosa
(San ANTONIO Mª
CLARET).
34.
Soy siervo de Santa María (San
FERNANDO III DE ESPAÑA).
35.
Todas las gracias que Dios reparte llegan a nosotros por manos de María (San ALFONSO
Mª LIGORIO).
36.
María es la negociadora del paraíso (San ANDRÉS
AVELINO).
37.
Por María nos fue dada la paz celestial (San
EPIFANIO).
38.
Si para dar algo a la Santísima Virgen pudiese venderme, me vendería
(Santo CURA DE ARS).
39.
Es imposible que se pierda quien se dirige con confianza a María (San
ANSELMO).
40.
Todo el que quiera que su devoción a la Virgen sea perfecta y digna de ella debe tender con todo su esfuerzo a imitar sus ejemplos
(San PÍO X).
41.
No se condenará el que sea verdadero devoto de la Virgen María, porque esta devoción es señal de predestinación
(San JUAN BERCHMANS).
42.
María es el principio de renovación para nuestra corrompida sociedad
(San MAXIMILIANO
KOLBE).
43.
Porque María no negó nada a Jesús en la tierra, Jesús no negará nada a María en el cielo
(Santa BRÍGIDA).
44.
Nada temerá con una madre tan buena (Santa ISABEL DE LA
TRINIDAD).
45.
Amad mucho a la Santísima Virgen y Rezadle mucho; ella os protegerá
(Santa BERNARDETTE).
46.
Una gran devoción a la Santísima Virgen, secreto para hacer grandes progresos en la virtud
(Beato LUIS AMIGÓ).
47.
Yo sé que la Virgen concede gran número de gracias a quien hace bien sus novenas
(Santo DOMINGO
SAVIO).
48.
Tiempo hace ya que el cielo y la tierra se habrían desconcertado si no los hubiera contenido María con sus oraciones
(San EUGENIO).
49.
¡Oh, María!, si yo fuese la reina del cielo y vos fueseis Teresa, quisiera ser Teresa
a fin de que vos fueseis la Reina del Cielo (Santa
TERESA DE LISIEUX).
50.
María es la tesorera de todas las gracias y dispensadora de todas las divinas misericordias
(San ALFONSO Mª
LIGORIO).
51.
Todas las bendiciones que nos han llovido del cielo son el fruto del Avemaría rezada con fervor y recta intención
(San JUAN BOSCO).
52.
Mi madre, con gran cariño, me pregunta a quién quiero; yo le digo madre mía,
a la Reina de los Cielos (Sierva
CARMEN GONZÁLEZ).
53.
Dios reunió en un lugar todas las aguas y las llamó mar; y reunió en otro todas las gracias y las llamó María
(San LUIS Mª
GRIGNION).
54.
La Virgen me parece más imitable que cualquier santa; era tan sencilla su
vida que con sólo mirarla me siento llena de paz (Santa ISABEL DE LA
TRINIDAD).
55.
El Rosario con sus 15 misterios, en los cuales se hace memoria y se medita la reconciliación de la naturaleza humana con Dios, es la escala para subir al cielo
(San FRANCISCO COLL).
56.
Tú sé siempre del grupo de los verdaderos devotos de la Virgen, es decir, de los que imitan sus virtudes: de esta forma probarás los frutos de su bondad y de su amor
(San JUAN BOSCO).
57.
Ella me ha alimentando, me ha educado, y me ha hecho progresar en mis estudios;
ella me ha obtenido la vocación a la Compañía de Jesús; por
ella espero salvarme; y sin ella estaría siempre desesperado (San JUAN
BERCHMANS).
58.
No caiga de tus labios el nombre de María, y tenlo perpetuamente grabado en medio de tu corazón
(San LEONCIO).
59.
Existe mucho mal en el mundo, pero la Inmaculada es más fuerte (San
MAXIMILIANO KOLBE).
60.
No podrá perecer ante el eterno Juez el que se haya asegurado la ayuda de su
madre (San PEDRO
DAMIANO).
61.
Si eres sacudido por las olas de la soberbia, de la ambición: mira a la Estrella, invoca a María. Si la ira, la avaricia, el deleite carnal, sacuden violentamente tu alma: mira a María
(San BERNARDO).
62.
Todo a Jesús por María, todo a María por Jesús (San MARCELINO
CHAMPAGNAT).
63.
Cuando uno acude a los santos, hacen esperar un poco: se siente que deben ir a presentar sus ruegos; pero cuando se pide una gracia a la Virgen, el socorro viene al
momento. ¿No lo han notado todavía? Pues hagan la experiencia y verán
(Santa TERESA DE
LISIEUX).
64.
La Madre de Dios me espera (Santa MARÍA
GORETTI).
65.
Sea yo, Señora, todo de vos, y nada tendré que temer (San SIMÓN
ROJAS).
66.
A los pies de la Virgen me parece ser más pequeño, y le digo las cosas como son
(San JOSÉ
MOSCATI).
67.
La devoción a María Santísima es el fundamento de mi vida espiritual
(San JUAN BERCHMANS).
reflexión
Invoca al Espíritu Santo
Lee en silencio y medita todas las citas
Frase elegida número: ¿Por qué?
¿Qué está significando María en mi vida diaria?
¿Qué recuerdo y oración tengo cada día para María?
¿Me planteo el comportamiento de María, para imitarla?
Medita la 43 y 63. ¿Qué me sugieren en mi vida?
Medita la 38. ¿Haría yo lo mismo?
El compromiso concreto que hoy debo hacer es:
Finalizar con oración de petición y acción de gracias a María