El hombre respetuoso prospera, el hombre recto es alabado. Abierta está la tienda para el silencioso, y amplio es el lugar del complaciente de palabras. Afilados están los cuchillos para el que se desvía del camino. No ha de haber premura, sino en su preciso momento.

Si te sientas con mucha gente, desprecia el pan que estás deseando, porque suprimir el deseo es sólo un breve instante, y la glotonería es una vileza, y se la señalará como tal. Una sola jarra de agua sofoca la sed, y un bocado de hierbas afirma el corazón. Porque algo bueno vale por la bondad, y un poco de algo equivale a lo mucho. Vil es el codicioso de vientre a destiempo, porque ha olvidado a aquellos que desatan la glotonería en sus casas.

Si te sientas con un glotón, tú comerás sólo cuando su voraz apetito haya pasado, y si bebes con uno ebrio, sólo habrás de tomar cuando su corazón esté contento. No porfíes por la carne junto a alguien voraz, sino toma lo que te da y no lo rechaces. Eso relajará.

Con respecto a aquel que está libre de reproches por el pan, no habrá discurso que prevalezca sobre él. Aquel que es amistoso, impasible, el violento será más amable con él que con su madre. Toda la gente le servirá.

Haz que se conozca tu nombre, pero que tu boca esté silenciosa. Y cuando se te llame, no te envanezcas de tu fuerza entre tus compañeros. Ten cuidado de crearte tu oposición. Uno no conoce lo que puede acontecer, lo que hace Dios cuando castiga.

Entonces el visir hizo que fuesen convocados estos sus hijos, después de que él hubiera adquirido el conocimiento de la forma de pensar de la gente, habiéndosele presentado sus cualidades ante él. Y concluyó él diciéndoles: «Con respecto a todo lo escrito en este rollo de papiro, escuchadlo como yo lo he dicho. No os excedáis en lo que se ha ordenado». Entonces ellos se tendieron sobre sus vientres, y lo leyeron en voz alta, tal y como estaba escrito. Hermoso fue ello en sus corazones, más que cualquier otra cosa en la tierra entera. Y procedieron a actuar de acuerdo con ello.

Entonces su majestad el rey del Alto y Bajo Egipto, Huni, se acostó en la orilla (murió). Y su majestad el rey del Alto y Bajo Egipto, Snofru, se irguió como rey eficiente en esta tierra entera. Kagemni fue instalado como gobernador de la ciudad y visir.

He concluido.